El costo total de los ciberataques puede llegar a 10,5 billones de dólares en el 2025
La industria logística es una de las más afectadas por el cibercrimen. Ya no basta sólo con la prevención, sino que también se requiere incorporar la predicción, la detección y las respuestas, todas englobadas en este nuevo concepto.
En el 2023, el costo medio de una violación de la seguridad de los datos fue de 4.45 millones de dólares. Para el 2025, se espera que el coste total de las violaciones de la ciberseguridad en todos los ámbitos llegue a casi 10.5 billones de la divisa estadounidense.
Son cifras estratosféricas, y que van en aumento. En el Top 10 de los sectores más afectados por los cibercriminales en todo el mundo está la logística, ya que es una de las industrias más conectadas globalmente.
“Si bien la digitalización aporta ventajas, la transformación dinámica de los sistemas puede dejar de lado algunos factores de defensa. Los servidores obsoletos, la ausencia de parches y las brechas de conocimiento entre los empleados equivalen a grietas en la infraestructura TI que crean lagunas para los ciberataques”, explica Alberto Oltra, CEO de DHL Global Forwarding en Sudamérica.
Como lo anterior se aplica a todos los aspectos del rubro logístico, incluidos el transporte marítimo, ferroviario y por carretera, la cadena de suministro y la entrega de última milla, los costos potenciales de este riesgo son altos y podrían alterar el abastecimiento global. Además, se introducen responsabilidades adicionales, como el robo de información sensible -sobre todo data del cliente- durante un ciberataque.
“Dado este complejo escenario es que surge la ‘Ciberseguridad 2.0’, que abarca la próxima generación de soluciones, procesos, reglas y regulaciones operativas estándar, que aprovechan la inteligencia artificial y otras tecnologías avanzadas. Este nuevo concepto implica herramientas de protección, detección y respuesta que no sólo previenen ataques, sino que también predicen activamente y detectan una amenaza de forma autónoma, y además responden”, menciona Oltra.
¿Qué viene?
Las empresas pueden utilizar la IA y el aprendizaje automático (machine learning) para identificar patrones y anomalías inusuales que indiquen un posible ataque. Para mitigar los daños, estos avances tecnológicos se adaptan rápidamente a nuevas amenazas para automatizar las respuestas.
“También, las compañías pueden usar análisis de comportamiento para monitorear el de los usuarios y el de la red, detectando desviaciones de la actividad normal que señalan posibles violaciones de seguridad. Y hay sistemas automatizados disponibles para difundir rápidamente inteligencia sobre una amenaza emergente, lo que permite una respuesta más veloz”, precisa el ejecutivo.
El panorama de las ciberamenazas logísticas está aumentando y volviéndose más complejo con la llegada de tecnologías nuevas y mejoradas. Para toda empresa, la ciberseguridad y la detección de amenazas deben ser fundamentales para asegurar las operaciones y proteger todos los recursos, centrándose en la cadena de valor del software en más niveles, protegiendo también a los proveedores y socios de la organización.
“La ‘Ciberseguridad 2.0’ ofrece un enfoque integral para navegar en panoramas de ciberamenazas en constante evolución. Al priorizar la prevención, la detección y la respuesta, la organización puede salvaguardar sus datos, sistemas y reputación en estos tiempos difíciles”, concluye.