Google no ha protegido los datos de usuarios, según la Corte Constitucional colombiana
La Corte Constitucional ha hecho una sentencia histórica para la protección del honor de los usuarios ante comentarios anónimos sobre ellos en plataformas sociales.
La Corte Constitucional acaba de ordenar a Google Estados Unidos, que respeta la legislación nacional en materia de protección de los usuarios y consumidores mientras ejerce sus actividades en el país. Esta sentencia llegóa raíz de una denuncia puesta por el propietario de Muebles Caquetá, quien interpuso una tutela luego de que una publicación anónima en la plataforma www.blogger.com, de propiedad de Google, afirmara que se trata de un estafador.
Ahora, de acuerdo con la Corte colombiana, aunque como bien la empresa ha dicho, está amparada por la legislación estadounidense en materia de libertad de expresión, protección de datos e infracciones a derechos de autor, al mismo tiempo, “las actuaciones se ven limitadas cuando se presentan casos de calumnia, injuria y difamación a través de plataformas que tiene bajo su control”.
Respecto a este asunto sobre la regulación nacional para proteger los derechos de los usuarios de Internet, Andrés Guzmán Caballero, CEO de Adalid, considera que la sentencia tiene varios alcances novedosos. “En primer lugar, normalmente Google Colombia y Google Ink, se hacen ver como personas jurídicas distintas y Google Colombia dice que no tiene ninguna injerencia sobre los contenidos, lo que hace este fallo, es que une las responsabilidades de Google Colombia con las de Google Ink y evidentemente ordena que tanto el uno como el otro, hagan cumplir la orden de la Corte Constitucional”.
Lo segundo novedoso, dice el directivo, es que “salvaguarda el derecho al buen nombre del debido proceso pues ordena que, incluso, cuando no exista orden judicial, los blogs sean anónimos y tengan cualquier tipo de información que sea errónea, será obligación de los buscadores bajarla sin necesidad de una orden judicial”. Considera Guzmán que esto es un avance gigantesco en materia de protección al buen nombre, en el derecho al trabajo, en el debido proceso.
“Además le da una carga social equitativa a buscadores como Google para que cumplan, no solamente con el objeto comercial que tiene, sino adicionalmente a eso, con un objeto de compromiso para hacer cumplir todos los protocolos y requisitos que exige la ley frente a los derechos fundamentales de las personas”, concreta.