Más del 30% de las empresas de manufactura piensan implementar IA en sus procesos

InnovaciónInteligencia Artificial

La inteligencia artificial sigue tomando el mando de los procesos en general. Aunque no es una tecnología nueva, se sigue trabajando en sus capas como el machine learning y la generación de contenidos para convertirla en una herramienta más precisa.

 La primera vez que se escuchó el término de inteligencia artificial (IA) fue en 1956, cuando John MacCarthy dio el nombre a esta tecnología que comenzó a desarrollarse en la década de los sesenta. Desde entonces, expertos han trabajado en la evolución e innovación constante de esta herramienta, que en la actualidad se ha convertido en la protagonista de la transformación digital en distintos sectores, como la industria manufacturera.

Recientemente la empresa de soluciones digitales, Zebra Technologies Group presentó su informe sobre “Manufactura Inteligente”, al que define como un concepto en el que se prioriza la integración de las tecnologías con procesos e interacciones humanas. De esta manera, se logra impulsar el poder de transformar y de mejorar la producción frente a las condiciones cambiantes en el sector.

En dicho estudio, se resaltó que al menos un 38% de los fabricantes tienen pensado implementar la IA en 2025, ya que la consideran “esencial” para los procesos y producción. Asimismo, reveló que el 86% de los expertos en manufactura están navegando por las olas de la transformación digital de sus empresas.

“El uso de la IA es cada vez más pronunciado. En el sector logístico, se está incorporando para inyectar capacidades muy significativas dentro de los almacenes. Urgen mejoras de trazabilidad, predicción y control para simplificar la labor de las personas  y ubicarlos en tareas de mayor valor”, precisa Leonardo Navarrete, gerente comercial de STG Chile.

Un comercio preparado con inteligencia para temporadas altas

El Cyber Monday 2024 cerró con un récord en ventas de 447 millones de dólares, lo que significó un incremento del 6,9% en comparación a los 418 millones de dólares de 2023. Además, superó la mayor marca que se mantenía desde el año 2021, cuando se reportó un total de 433 millones de dólares, de acuerdo con las cifras publicadas por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS).

Frente a este escenario, Navarrete destaca la importancia de que las compañías están preparadas con inteligencia, robótica y más automatización para que de esta manera puedan prever la demanda y algunas tendencias futuras en estas fechas de alto consumo.

“Hoy día tenemos sistemas de automatización de picking, herramientas que mejoran los despachos con robotización y, por cierto, el uso de IA para anticiparse en función de los datos que recopila. El futuro ya es el presente. Actualmente, con las herramientas tecnológicas adecuadas e integradas, las compañías ya pueden saber el volumen de entregas que realizarán en fechas importantes, como son los Cyber, Black Friday o Navidad”, menciona el ejecutivo.

La “superinteligencia artificial”, el siguiente paso a la IA generativa

Eriberto Cárdenas, gerente de ingeniería y soluciones para el norte y sur de Zebra Technologies en Latinoamérica, adelanta que próximamente se podría estar hablando sobre la “superinteligencia artificial”, un proceso que, a su juicio, vendrá posterior a los que se conoce hoy en día como IA generativa.

“La inteligencia artificial es un todo, pero dentro de ese todo hay varias capas, entre ellas el machine learning, deep learning y generación de contenido (…). Partiendo de este último concepto, hay algo que en este momento se está desarrollando: la superinteligencia artificial, el siguiente paso a la IA generativa”, indica Cárdenas.

Explica que, aunque es apenas un concepto teórico, esta nueva evolución integra todas las aristas de toma de decisión de la IA con la facultad de darle el poder a las máquinas de tomar decisiones a futuro.

Sin embargo, tanto Cárdenas como Navarrete, coinciden en que la solución no está siendo preparada para suplir al ser humano, sino para darle mayor potencial en sus funciones, dejando a un lado las tareas tediosas que, de alguna manera, merman la productividad y eficiencia.

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