FMI: Venezuela podría vivir inflación del 720% en 2016
Mientras se espera que Colombia, Perú y Chile crezcan este año, Venezuela, Brasil y Argentina notarán recesiones, de acuerdo con el FMI.
El Fondo Monetario Internacional o FMI acaba de publicar sus predicciones de mercado para este año 2016 que acaba de comenzar y que predicen que la inflación en Venezuela podría alcanzar cifras récord tras aumentar en un 720%. A nivel regional, se espera que América Latina vuelva a contraerse este año, por segundo consecutivo, algo que no sucedía desde el periodo 1982-1983.
De acuerdo con el informe presentado por el FMI, “la recesión regional oculta el hecho de que la mayoría de los países continúan creciendo, en forma moderada pero indudable. En particular, la situación específica de cada país la determina la interacción entre los shocks externos y los fundamentos internos de la economía. Mientras que los países con sólidos marcos de política económica han venido ajustándose a los shocks externos en forma suave, aquellos cuyos fundamentos internos son más débiles están experimentando una caída significativa”.
Eso quiere decir que hay países que seguirán creciendo de forma considerable como Colombia, Perú o Chile, pero las caídas de Brasil, Venezuela y, en menor medida, Argentina, influyen en la caída si analizamos a nivel regional.
De acuerdo con los analistas de la entidad, “Chile, Colombia y Perú continúan un proceso de ajuste relativamente ordenado, en donde la combinación de políticas económicas (grandes depreciaciones del tipo de cambio, consolidación fiscal paulatina y políticas monetarias acomodaticias) ha evitado una contracción económica”. El FMI afirma que estos países, con gobiernos enfocados al capitalismo y más abiertos a la inversión extranjera, tienen “marcos de políticas sólidos, instituciones creíbles, mercados financieros sólidos y costos favorables de endeudamiento externo”.
En Brasil, dice el informe, que “una combinación de fragilidades macroeconómicas resultantes del lento ajuste interno, el escándalo de amplias proporciones que involucra a funcionarios del gobierno y empresarios, y problemas políticos, ha paralizado la inversión y domina las perspectivas económicas”. Así, tras una fuerte contracción de 3,8% en 2015, se prevé que el producto retroceda otro 3,5% en 2016.
Por su parte, en Venezuela, “los desequilibrios fiscales ya estaban provocando un efecto pernicioso sobre la economía antes del derrumbe de los precios del petróleo. Esos problemas se agravaron cuando el descenso de los precios del petróleo desencadenó una crisis económica, con una caída del producto estimada en casi 18% durante 2015 y 2016 (la tercera mayor caída en el mundo)”. Por otro lado,”la falta de divisas ha redundado en una escasez de bienes intermedios y un desabastecimiento generalizado de bienes esenciales”.