Código abierto en las empresas, ¿sí o no?
El software corporativo basado en criterios “open source” se está abriendo paso frente a las soluciones propietarias por su flexibilidad y su asequibilidad. En este reportaje mostramos las alternativas más populares.
“Básicamente, son cinco”, enumera Bartolí. “En primer lugar, es un producto flexible, con una alta capacidad de adaptación a las necesidades específicas de cada cliente. Segundo, tiene una estructura modular, con más de 600 módulos disponibles lo que lleva consigo que sea fácil extenderlo e integrarlo con aplicaciones de terceros. Tercero, es un producto en entorno web, lo que permite utilizarlo en cualquier momento y lugar con tan sólo un navegador, y utilizar cualquier tipo de dispositivo, incluidos, por supuesto, smartphones y tablets. Cuarto, es un producto con una elevada usabilidad, lo que deriva en el aumento de la productividad y en la disminución de la curva de aprendizaje. Y quinto, es un producto asequible, con un coste que es apenas una fracción del de otras aplicaciones”.
Entre su red de clientes cuenta con casos tan curiosos como el de la multinacional francesa Decathlon, que utiliza las soluciones de Openbravo para la gestión de sus tiendas en la India, o el de SAIC, un multimillonario contratista que trabaja para el Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Aunque uno de los acuerdos que más orgullo causa en el seno de la empresa española es el que han alcanzado recientemente con el portal de descuentos Offerum. “Es un caso del que nos sentimos especialmente satisfechos porque el cliente es líder en su sector, de hecho recibió el premio a la mejor tienda online en los premios E-commerce 2011, y porque antes de elegirnos analizó diversas opciones”, relata su vicepresidente de operaciones de canal. “Al final se decidió por nosotros” para agilizar su operativa.
El respaldo de la Administración Pública (en España)
Muchas empresas encuentran los sistemas de ERP tradicionales “excesivamente complejos, rígidos y costosos”, añade este portavoz de Openbravo. “Necesitan un sistema de ERP, de eso no hay duda, para poder optimizar su productividad y competitividad, especialmente en un entorno económico tan difícil como el que estamos viviendo actualmente. Pero les interesa que no sea un ERP cuyos costes se coman todos sus beneficios del año”. Y es que la calidad y la flexibilidad son alicientes importantes, pero el abaratamiento de los costes, por evidente que sea, no deja de ser un factor fundamental del software “open source”.
Es por eso que muchas Administraciones Públicas se están sumando al espaldarazo del sector privado a las soluciones de código abierto. El Gobierno de Asturias es cliente de Openbravo y distintos organismos autonómicos se han embarcado en el desarrollo de sus propias distribuciones, caso de la Consejería de Economía, Comercio e Innovación de Extremadura que en su día impulsó la creación de LinEx y sus equivalentes en Cataluña (Linkat), Galicia (Trisquel), País Vasco (EHUX), Cantabria (LinuxGlobal), Valencia (LliureX), Aragón (Augustux), Castilla-La Mancha (Molinux) y Andalucía (GuadaLinex), entre otras Comunidades. Tanto es así que un informe del Centro Nacional de Referencia de Aplicación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (CENATIC) estima que 9 de cada 10 Administraciones de nuestro país recurren a algún tipo de software libre para sus entornos de servidor, y que prácticamente el 80% de ellas hace lo propio en sus redes de ordenadores.
“Cada vez que surge una nueva tecnología, siempre hay un periodo inicial de precaución, especialmente en el caso de las tecnologías abiertas, donde se tiene una sensación de inestabilidad o poca seguridad”, admite Bartolí al preguntarle sobre la tradicional barrera de desconfianza que rodea al mundo del código abierto. Pero el ejecutivo también apunta que “no hay que buscar demasiado para ver que los sistemas de código cerrado se han visto también implicados en serios fallos de seguridad, que han afectado a los datos personales de sus usuarios”. En el caso de España las alternativas “open source” “han demostrado que sus ventajas son tan superiores como para hacer que se pierda poco a poco el miedo a sus hipotéticos riesgos, y creo que esta consideración va a seguir creciendo en los próximos años”, aventura nuestro entrevistado.
Un futuro prometedor (a pesar de -o gracias a- la crisis)
¿Y a día de hoy? ¿Influye la crisis económica en el cambio de paradigmas? “La situación financiera favorece claramente a las empresas que basan su oferta en un modelo de negocio como el nuestro: facilitar al sector corporativo una herramienta imprescindible para su gestión del día a día, capaz de adaptarse plenamente a sus necesidades, escalable a medida que evolucione el negocio y con un coste para la empresa que no afecte a su cuenta de resultados”, aseveran desde OpenBravo. “Se miran muchos los gastos e inversiones, lo cual no quiere decir que no se hagan, ya que precisamente es el tiempo de invertir; pero se tiende a buscar soluciones que ayuden a las empresas a moverse mejor en tiempos de crisis, e incluso a prosperar en medio de la misma”.
Parece que los elementos se han aliado en un timing perfecto para transformar estas tecnologías, que nacieron como iniciativa de hackers e investigadores, en base de innovación para la industria a nivel global. Los casos de éxito, la solidez de las propuestas y la rapidez con la que se liberan las actualizaciones del software de código abierto están contribuyendo a la creación de una reputación sólida y a la difusión de los programas con corazón “open source” a niveles impensables hace unos años.