Reimaginando a la TI para un mundo digital
Por Steve Sasse, director de Equinix América Latina.
Tradicionalmente, la infraestructura de TI estaba centralizada, con cargas de trabajo y nubes gestionadas desde un centro de datos corporativo. Con una rápida evolución en el panorama digital actual, ese modelo ya no funciona; a medida que los productores y creadores digitales realizan cada vez más negocios en el borde, más cerca de empleados, socios y clientes, las infraestructuras de TI que respaldan esas interacciones se están distribuyendo.
De arquitectura centralizada a digital-first
Las organizaciones líderes y sus socios esperan aplicaciones receptivas y la capacidad de intercambiar datos al instante y sin problemas. Estas capacidades requieren una infraestructura lista para digital caracterizada por una carga de trabajo de primer orden y una arquitectura de núcleo híbrido. Las empresas maduras que implementan una arquitectura de digital-first están encontrando nuevas formas de crear valor, mientras que las empresas nativas digitales “nacidas en la nube” están adelantándose a sus contrapartes tradicionales y creando mercados completamente nuevos. En ambos casos, estas compañías claramente están haciendo algo bien.
Si bien, mover las cargas de trabajo a la nube en un enfoque de infraestructura multicloud híbrida ayuda con la agilidad, se puede encontrar una verdadera diferenciación en el borde digital, donde las aplicaciones y el procesamiento de datos se producen cerca de los usuarios, lo que garantiza un rendimiento óptimo.
Varios conductores convincentes abogan por ir al límite. Éstas incluyen:
- Explosión de datos: no es práctico y arriesgado realizar un backhaul de grandes volúmenes de datos a centros de datos centralizados. IDC predice que el 20% de los datos globales se entregarán a los usuarios en tiempo real para 2025.
- Distancia: se reduce a la física. La distancia física simplemente mata el rendimiento. En una era en la que el nuevo descenso es lento, solo 30 ms de latencia reduce el rendimiento en casi 6 veces.
- Costo: el transporte de datos aumenta los costos para todas las partes. Según un análisis reciente, 100 TB de datos pueden costar hasta $ 100 mil dólares anuales en egreso de la nube y cargos interregionales (antes de los costos de red).
- Ecosistemas digitales: las empresas se unen para intercambiar información y servicios en el borde, donde se encuentran los usuarios. Estas conexiones comprenden ecosistemas digitales, emergiendo rápidamente como centros de innovación y crecimiento de nuevos ingresos. Según McKinsey, los ecosistemas digitales de hoy impulsan a siete de las 12 compañías más grandes del mundo por capitalización de mercado y, para 2025, representarán más del 30% de los ingresos corporativos globales.
Estas fuerzas, junto con las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial (IA), el internet de las cosas (IoT), la red definida por software (SDN) y la virtualización de funciones de red (NFV), hacen que la interconexión directa y segura en el borde digital sea un imperativo. El resultado es una nueva topología de infraestructura de TI, una que se está transformando rápidamente de centros de datos centralizados a centros de interconexión distribuidos donde los datos se pueden intercambiar de manera eficiente.
Hacer las cosas bien: ¿por qué es importante la interconexión?
Si bien llevar la TI al borde se está generalizando, hacerlo bien no es tan simple. La conexión de TI a través de Internet pública es propensa a la latencia y fundamentalmente insegura, mientras que las redes MPLS y los circuitos dedicados pueden ser costosos. En nuestra experiencia de trabajar con clientes en todo el mundo, hemos descubierto que las empresas exitosas están adoptando arquitecturas basadas en la interconexión privada. Estas infraestructuras evitan la Internet pública para garantizar un rendimiento óptimo, escalabilidad y resistencia al tiempo que mitigan las preocupaciones de seguridad y cumplimiento.
La implementación de una arquitectura lista para uso digital en una plataforma interconectada globalmente, como Platform Equinix, permite a las empresas mejorar el rendimiento y reducir los costos en un núcleo híbrido, transformar la experiencia del usuario en el borde e integrar nuevas cadenas de valor a través del acceso directo y seguro a ecosistemas densos.