Nuevo paso al frente de Red Hat en virtualización
Acaba de ver la luz la beta de Red Hat Enterprise Virtualization 3.1, con escalabilidad mejorada y nuevo soporte para la última generación de chips de Intel y AMD.
Red Hat acaba de anunciar una nueva actualización de su suite para la virtualización de servidores y escritorios, Red Hat Enterprise Virtualization 3.1.
Aún en fase beta, la compañía busca que sean los propios clientes los protagonistas de posibles modificaciones para mejorar el producto, algo habitual en la comunidad open source. Obviamente, esta revisión tendrá que esperar algún tiempo (se espera para finales de 2012) hasta que sea recomendable su uso en entornos de producción. Así lo explica Red Hat en el comunicado: “Esta es la primera de varias versiones beta que permitirán a los clientes de Red Hat Enterprise Virtualization tener acceso a las nuevas características, además de devolvernos su feedback para determinar posibles mejoras y qué tecnologías son buenas para ellos”.
Los responsables han querido prestar especial atención a las capacidades de escalabilidad. A partir de ahora será posible desplegar hasta 120 procesadores virtuales y 2 TBytes de memoria.
La nueva beta introduce soporte completo para la última generación de chips x86 de Intel (Sandy Bridge) y AMD (Bulldozer).
Por otra parte, ya es posible llevar a cabo procesos de migración del almacenamiento en vivo cuando se trabaja con instancias virtualizadas. También se mejoran las tareas de migración
de máquinas físicas a virtuales.
Estas y otras funcionalidades se pueden encontrar en Red Hat Enterprise Virtualization 3.1 beta, disponible exclusivamente para clientes del producto.