La tecnología ha conllevado a que muchas industrias mejores y transformen sus modelos de trabajo. En el caso de la construcción, uno de los procesos más modernos es el llamado BIM (Building Information Modeling), el cual consiste en un modelado de información para la edificación usando software de vanguardia.
BIM es un proceso de generación y gestión de datos de una obra durante su ciclo de vida, utilizando softwares especializados de modelado en tres dimensiones y en tiempo real, que logra disminuir la pérdida de tiempo y recursos en el diseño y la construcción.
Este proceso produce el modelo de información (también abreviado BIM), que abarca la geometría del edificio, las relaciones espaciales, la información geográfica así como las cantidades y las propiedades de sus componentes.
Algunos especialistas aseguran que se han recopilado, los principales y más importantes beneficios de BIM, explotando su gran utilidad como instrumento y tecnología fungiendo como apoyo a los sistemas de trabajo aplicados a la construcción.
Modelado 3D
El Building Information Modeling es mucho más que un paquete de herramientas de diseño y dibujo tridimensional. Es una tecnología y sistema de trabajo con una gran virtud: el uso y manejo transversal, en todo el ciclo de vida del proyecto, de la información que el modelo 3D contiene.
La definición desarrollada en el National BIM Standard–United States (NBIMS-US) es: “BIM es una representación digital de las características físicas y funcionales de una construcción. Como tal, sirve como recurso de conocimiento compartido para obtener información sobre una edificación que forma una base fiable para las decisiones durante su ciclo de vida desde la concepción en adelante.”
Según el Colectivo Iberoamericano de Tecnología e Innovación (CITI), que ésta formado por un grupo de profesionales y empresas que actualmente destacan dentro de la industria de la Arquitectura, Ingeniería y Construcción, en la actualidad se habla mucho de esta metodología como la herramienta del futuro dentro de la industria, pero en realidad el futuro ya está aquí y es ahora.
“Por lo anterior, las empresas y profesionistas de la construcción debemos adaptarnos para no quedarnos atrás y aprovechar los beneficios directos e indirectos que se generan al usar BIM. Una vez que el cliente experimenta esta tecnología en sus proyectos, difícilmente quiere retroceder”, aseguran en el CITI.
Entre los beneficios de esta tecnología que ya puede ser adquirida por las constructoras, está la facilidad para compartir información detallada, la reducción de errores, eliminación de conflictos e interferencias, así como ahorro de 20% en tiempo de correcciones de diseño, y un modelo federado del proyecto para incluir o modificar operaciones en curso. Muy útil para edificar y ver variables en zonas sísmicas.
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