Los reguladores antimonopolio de la UE podrían poner una multa altísimo a Alphabet, la empresa matriz de Google por las malas prácticas de competencia en servicio de compras. Se cree que vaya a haber una resolución antes del verano, como han dicho dos personas familiarizadas con el asunto a Reuters.
La autoridad de competencia de la Unión Europea acusó a Google en abril de 2015 de distorsionar los resultados de la búsqueda en Internet para favorecer su servicio de compras, perjudicando tanto a rivales como a consumidores. La empresa estadounidense en el pasado rechazó los cargos, diciendo que los reguladores ignoraron la competencia de los minoristas en línea Amazon y de eBay.
Las multas para las empresas que se encuentran culpables de violar las normas de competencia de la UE pueden alcanzar el 10% de su facturación global, que en el caso de Google podría ser de alrededor de 9.000 millones de dólares de su facturación de 2016. Aparte de la multa, la Comisión le pedirá a Google que detenga sus presuntas prácticas anticompetitivas, pero no está claro qué medidas ordenará adoptar a la compañía para asegurar que los rivales obtengan igualdad de trato en los resultados de las compras por Internet.
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