Las tecnologías están en proceso de cambiar todos los ámbitos de nuestra vida diaria. Y también la educación. La UNESCO, el programa de Naciones Unidas para la cultura, considera que “las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) pueden contribuir al acceso universal a la educación, la igualdad en la instrucción, el ejercicio de la enseñanza y el aprendizaje de calidad y el desarrollo profesional de los docentes, así como a la gestión dirección y administración más eficientes del sistema”.
Mientras que SiliconWeek ya ha realizado un reportaje hablando de cómo las tecnologías pueden ayudar a cerrar las altas cotas de desigualdad desde la educación, en esta ocasión, de la mano de voceros de Lingokids, Microsoft, Inoma, Walinwa e Instructure, empresas que ofrecen tecnologías para el sector educativo, veremos cómo está cambiando este, gracias a las TIC y las infinitas oportunidades que ofrecen.
Las generaciones futuras de la sociedad han nacido rodeados de dispositivos electrónicos, los manejan a la perfección y serán parte de esencial de su relación con su entorno en el futuro. Recuerda Cristóbal Viedma, CEO de Lingokids, empresa que ofrece una aplicación para que niños de entre los dos y los ocho años de edad puedan aprender inglés desde casa y a un precio asequible, recuerda que “las nuevas formas de comunicación e información han cambiado la manera que tenemos de relacionarnos, y más aún cuando pensamos en los nativos digitales, que no han conocido lo anterior. Está generación necesita aprender de una forma interactiva, de una manera que capte su atención y así se fijen los conceptos, y ahí es cuando entra en juego la tecnología”. Y es que, recuerda el emprendedor que “para los niños, el mundo que les rodea es digital, mientras que su educación en muchos casos no lo es”.
Además del hecho de que las TIC puedan variar los procesos de enseñanza con novedades, tenemos que tener en cuenta que es muy importante para los niños poder interactuar en su día a día con los dispositivos digitales, porque esa será una habilidad muy necesaria para su futuro profesional. “Las tecnologías son herramientas de apoyo para lograr procesos de aprendizaje de manera mas eficiente y efectiva, pero no son las únicas. El dominio de la tecnología, sin embargo si es primordial para la competitividad individual en un mundo donde la comunicación y el trabajo en equipo cobra cada día mas importancia, donde la persistencia es una característica invaluable para la solución de los problemas que atañan al mundo, y donde la diversidad de puntos de vista pueden enriquecer el pensamiento crítico. Es benéfico emplear el uso de tecnología en la enseñanza y el aprendizaje como parte de la formación integral de la persona”, tal y como ha explicado Cathy Austin, directora de despliegue y de operaciones en Inoma.
Sobre la importancia de que los jóvenes se acostumbren a usar las tecnologías en sus métodos de aprendizaje, explica Jorge Silva Luján, Director General de Microsoft México que “desde la alfabetización digital, hasta programar, pasando por el fomento de competencias STEM, es de suma importancia impulsar el interés por áreas de conocimiento esenciales para los empleos, emprendimiento y crecimiento económico”.
La tecnología es fundamental para el proceso de aprendizaje, como sentencia Zyanya Bejarano directora regional para Instructure, firma que tiene la solución Canvas en el mercado. Varias son las razones que da la directiva. “Primeramente, así como con la mayoría de las industrias, existen eficiencias que pueden ser creadas. Por ejemplo, podemos automatizar el proceso de calificaciones para darles a los profesores más tiempo en el aula. En caso necesario, podemos escalar y ofrecer clases en línea en áreas remotas que en otras circunstancias quedarían fuera de acceso a ofertas educativas. Donde hay un aumento de la población, una reducción de los presupuestos y poblaciones rurales en todo el mundo, la tecnología que ofrece educación participativa es una obligación”, recuerda.
Por otro lado, considera Bejarano que La tecnología también necesita seguir mejorando la pedagogía. El mundo del trabajo donde los estudiantes ingresarán en algunos años es casi desconocido; así, ellos necesitan construir capacidades para prosperar en el inestable mundo laboral. A medida que los estudiantes pasan de la educación al trabajo, su entorno se transforma de ser estructurado en educación básica a ser desestructurado en la universidad y el lugar de trabajo”, explica.
Las TIC, como coinciden los entrevistados para este reportaje, vienen con modelos educativos adaptados a la sociedad que se cree que existirá en el futuro y, por tanto, adaptados a las demandas del futuro laboral que los niños y jóvenes de hoy van a encontrar. “Los modelos de aprendizaje, al igual que cualquier proceso al que nos enfrentamos hoy en día están sufriendo esta transformación aportando grandes beneficios a todos los implicados; los alumnos, los padres, el profesorado e incluso las instituciones que controlan la evolución de la calidad de la enseñanza”, ha explicado José Ramón Cañamero, director de negocio de Walinwa.
Otro aspecto que no hay que obviar es que las nuevas generaciones, al estar tan expuestos a las tecnologías, a veces su uso puede ser contraproducente: muchos estímulos que puedan despistarles, contenidos de baja calidad o inadecuados… Explica Cristóbal Viedma desde Lingokids que “las nuevas generaciones tienen una sobreexposición a impactos de todo tipo, y necesitamos que los “impactos educativos” sean interesantes para ellos, además de efectivos. Para ello, debemos ofrecer a los estudiantes métodos actuales, dinámicos e interactivos para acercarles la enseñanza, para que sientan pasión por aprender… debemos hablar su mismo idioma”.
Estamos viviendo un cambio de época en lo que se refiere a comunicación. Las nuevas generaciones tienen una sobreexposición a impactos de todo tipo, y necesitamos que los “impactos educativos” sean interesantes para ellos, además de efectivos. Para ello, debemos ofrecer a los estudiantes métodos actuales, dinámicos e interactivos para acercarles la enseñanza, para que sientan pasión por aprender… debemos hablar su mismo idioma.
Por su parte, Zyanya Bejarano desde Instructure, añade que “la tecnología puede mejorar la enseñanza a través de métodos de entrega combinados; de esta forma, se estimula a los alumnos a aprender a su propio ritmo y de su propia manera, aumentando los procesos meta cognitivos y tornándolos más autodidactas, en un ambiente menos estructurado. La colaboración con otros alumnos y las evaluaciones entre pares también estimula la curiosidad y la capacidad de resolución de problemas: capacidad que se desarrolla fuera de la sala de aulas a través del uso de la tecnología, y que ayudará a los estudiantes cuando deban entrar en la fuerza de trabajo”.
Frente a estos niños que han nacido de la mano de terminales digitales, encontramos a sus padres, madres o tutores y a unos profesores que son de otra generación, en la que el aprendizaje llegaba de la mano de libros, apuntes y pizarras de forma exclusiva. Puede resultar complejo convencer a centros educativos, familias y educadores de integrar novedades con las TIC. Desde Pinion Software nos explican que mientras los centros privados se muestran interesados en integrar su herramienta tecnológica para mejorar as habilidades de los estudiantes, ningún centro público en México lo ha hecho, porque los procesos burocráticos son muy largos en el sector, ralentizando así la llegada de las novedades.
Ramón Cañamero desde Walinwa explica que a la empresa no le está costando convencer a los profesores y centros educativos “de la necesidad e idoneidad de la plataforma pero valoran de manera muy cuidadosa el impacto que tiene en su organización y su capacidad para integrarlo en el currículo de los alumnos. Para todos es prioritario pero estamos en el proceso de alcance de madurez por parte de las organizaciones en el que la tecnología y las posibilidades que pone a nuestra disposición deje de ser una opción para convertirse en el vehículo de acceso al siguiente nivel del modelo educativo”. Y recuerda que un reto es que no todos los centros tengan la integración en la tecnología en cuanto a dispositivos y conectividad que les permita acceder a este tipo de ayudas.
Zyanya Bejarano desde Instructure añade que el aprendizaje no solo sucede en el aula. “Creemos que el aprendizaje sucede por doquier, dentro del aula y fuera de ella, y también en la vida: un aprendizaje de por vida. La educación no se detiene cuando se entra en la fuerza laboral; incluso después de eso seguimos obteniendo conocimiento y capacidades a lo largo de nuestras vidas, y la tecnología nos ayuda a lograrlo. La tecnología ayuda a proporcionar educación y habilidades donde sea que nos encontremos, cuando quiera que lo deseemos y en la forma más digerible. La tecnología nos conecta a diversas personas que pueden ayudarnos, trabajar con nosotros, colaborar con nosotros y de las que podemos aprender. Las posibilidades son infinitas”.
Al mismo tiempo, desde Inoma explican que “pensamos que los niños deben ser agentes activos de su propio aprendizaje y las TIC’s les brindan una oportunidad más para lograrlo al hacer las herramientas educativas mas dinámicas y divertidas. También aportan la oportunidad de competencia y superación de obstáculos con retro-alimentación inmediata que ofrece satisfacción y estimula la confianza en si mismos”.
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