El último en hacernos recordar lo que el futuro laboral nos podría deparar ha sido Jack Ma, que como líder de Alibaba, la gran plataforma de ventas online de China, ha mostrado ser también ser un gran visionario del mercado: “En 30 años, el mejor CEO será un robot“, ha dicho el líder.
En una conferencia sobre iniciativa empresarial en China, Ma advirtió sobre tiempos oscuros en el futuro para las personas que no están preparadas para la conmoción que traerá la tecnología y declaró que “en las próximas tres décadas, el mundo experimentará mucho más dolor que felicidad“, dijo el multimillonario, añadiendo que los sistemas educativos deben educar a los niños para ser más creativos y curiosos o no estarán preparados para el futuro.
Los robots ya no son un tema de futuro. Son una realidad actual, una tendencia que ya ha comenzado a funcionar, son unos dispositivos que, a diferencia de los humanos no necesitan descansar para funcionar y que ayudan a las empresas a ahorrar en costes, cuando cumplen funciones de humanos. Por ahora, falta perfeccionar sus técnicas y crear robots que puedan ejercer más tareas pero las máquinas como mano de obra ya cubren miles de empleos.
No es algo nuevo. La Revolución Industrial que se produjo hace casi 200 años trajo un nuevo panorama laboral y es que las máquinas comenzaron a recortar la necesidad de personal y por tanto se mostraron como una fuente de desempleo. La novedad que encontramos ahora es que la bautizada como Revolución Digital que estamos viviendo lleva a que los robots puedan realizar, cada vez más, tareas más complejas e incluso la mano de obra cualificada o muy especializada podría verse afectada por los robots.
¿Cuáles son los trabajos que más peligran?
Ya llevamos años viendo cómo las grandes empresas chinas fabricantes y ensambladoras de productos, prescinden de sus trabajadores y los sustituyen por robots para realizar una tarea que es muy automática. Esto está teniendo consecuencias en un país que está viviendo un amplio éxodo rural de personas que dejan atrás sus pueblos para pasar a sobrepoblar las regiones donde hay instaladas estas grandes fábricas. Un ejemplo es Foxconn, la marca que produce smartphones y tabletas de grandes empresas como Apple.
El pasado mes de enero, como publicó SiliconWeek,
los líderes empresariales reunidos en el
Foro Económico Mundial o FEM
en la localidad suiza de Davos exponían preocupación del mercado por el impacto que pueda tener la inteligencia artificial y los robots sobre las pérdidas de numerosos puestos de trabajo en diversos sectores. Pero, a la vez, reconocían, que estas tecnologías ayudan a las empresas en el ahorro de costos y en un aumento de la productividad, pero creen que en asunto debe ser abordado con mayor seriedad, para analizar cómo hacerle frente.
Tenemos que, según los datos del
Foro Económico Mundial de Davos, en los 15 países más industrializados del mundo peligran más de siete millones de empleos de aquí a 2020. A su vez, un informe de la Universidad de Oxford
habla de 1.600 millones de puestos de trabajo destruidos en todo el mundo en 18 años. Por su parte, la Universidad de Oxford, de la mano de la BBC,
cuentan con una base de datos, con informaciones sobre las profesiones que más sufrirán la robotización del mercado laboral y que concluye que los
operadores telefónicos son los que más probabilidades tienen de ver sus empleos
suprimidos por robots, y le siguen: mecanógrafo, secretario de despachos jurídico, asesor financiero, clasificador en fábricas, inspector técnico, administrador de ventas,
encargado de libros de cuentas, nóminas y salarios, oficial de finanzas, agente de pensiones y seguros, empleado de banca o de correos, administrativo o financiero, funcionario de ONG, administrativo de gobierno localo empleado de biblioteca. Por el contrario, encontramos que las profesiones de ámbitos sociales, relacionadas con el trato y cuidado de otros humanos, y las artes tienen menos competencia en los robots. Al menos en lo que a un futuro cercano se refiere. El mismo estudio concluía que
artistas, profesores, periodistas, enfermeros o médicos, gestor de hoteles y psicólogos son de los que menos riesgos corren.
Grandes empresas que ya usan robots… o están en camino
El pasado mes de febrero,
Changying Precision Technology Compan, una fábrica de teléfonos celulares de China,
fue la primera compañía en sustituir el 90% de sus empleados por robots. Esto supone un gran cambio en el paradigma mundial. Y no hay que olvidar que esta práctica traerá importantes consecuencias en China y, en el futuro en otros países, que comenzaron no hace mucho tiempo su industrialización. En el país asiático, muchos ciudadanos abandonaron recientemente el campo para encontrar trabajo en las fábricas, mientras que ahora estos empleos se están viviendo reemplazados por máquinas. Esta marca, como publicó
SiliconWeek, pasó hace un año de
650 operarios a 60 operarios. De todos modos, esta noticia se conoció hace unos meses, cuando la empresa mostró sus buenos resultados anuales. Ya que los robots, aunque suponen una gran inversión inicial, suponen un ahorro de costes mensual frente a los trabajadores.
Un caso más cercano lo tenemos con Accenture, que ha anunciado que cuenta con 170 robots que ayudan a su equipo a realizar sus tareas en Argentina, usando para ello redes neuronales e inteligencia artificial que pueden absorber conocimientos y aprender de los errores. Sergio Kaufman, CEO de Accenture para Amèrica Latina (menos para los mercados de Brasil y de México) ha explicado que la empresa planea contar con 80 robots más para el año 2017. Se encargan de operaciones como la distribución de mails, el archivo de documentos o la consolidación de reportes.
DHL Supply Chain, el área de DHL especializada en la logística y cadena de suministro, ha anunciado la próxima puesta en marcha de un proyecto piloto que incorporará robots autónomos y colaborativos para ejecutar las labores de localización y recogida de producto en almacén y Disney ha presentado una solicitud para el registro de una patente para robots de cuerpo suave que puedan representar un personaje, según un reporte del diario Orlando Sentinel. En el texto se especula sobre el uso de estos dispositivos impulsados por inteligencia artificial que aparentemente podrían representar a los distintos personajes de sus películas para servir como anfitriones e interactuar con los visitantes a los parques temáticos de una manera segura.
Otra noticia importante para una gran parte de la población de América Latina es que el empleo de conducores también peligra. No hay que olvidar las pruebas que grandes empresas como Google y Uber ya están probando sus vehículos autónomos. En la región, el complicado tráfico podría jugar a favor de taxistas y otros expertos al volante para ralentizar la llegada de estos carros que pueden circular solos.
