El emprendedor Elon Musk, creador de grandes empresas como Tesla, especializada en los automóviles automáticos y se espera que autónomos en un futuro, o SpaceX, ha pedido a las autoridades de Estados Unidos, país donde tienen la sede sus marcas, que regule la inteligencia artificial para un más sano desarrollo de este mercado y de sus tecnologías.
Musk pide que los legisladores hagan algo sobre lo que él ve como una enorme “amenaza existencial” antes de que se convierta en un problema demasiado grande pero considera que la gente no es consciente de la problemática, porque se contempla como “muy etérea”. Los robots podrán suponer un peligro para la seguridad pública y el emprendedor pide a los gobernantes ser proactivos en la regulación en lugar de reactivos. “Pienso que en el momento en el que estamos, sería demasiado tarde para ser reactivos en la creación de una regulación de Inteligencia Artificial”, añadió.
Es indudablemente digno de pensar en el impacto que la inteligencia artificial podría tener en el mundo, pero para muchos partidarios de la IA todavía parece demasiado pronto para regular tales sistemas, refleja el periódico estadounidense, sobre las declaraciones de Musk. Mientras que el software de aprendizaje automático comienza a rivalizar con el intelecto humano en algunas tareas específicas,como el reconocimiento de voz, la traducción y la identificación de objetos en imágenes, uniendo esos componentes en la inteligencia más general que preocupa a Musk sigue estando lejos.
Por Anthony Cusimano, Director de Marketing Técnico en Object First.
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