El cambio climático es hoy uno de los temas clave de la agenda mundial, debido a que este fenómeno ha dejado de ser una simple teoría para convertirse en un problema que afecta a los países de todos los continentes, perturbando las economías nacionales y afectando la vida de miles de personas que a diario tienen que hacer frente a los eventos climáticos que cada vez se han vuelto más violentos y extremos.
Por ello grandes y pequeñas empresas incluyen entre sus estrategias, acciones que ayuden a hacer frente a este fenómeno. Como resultado, toda empresa o persona que no considere alguna medida en respuesta a este compromiso no solo es vista con malos ojos, sino que corre el riesgo de quedar rezagada ante el avance tecnológico y estratégico que otros tantos ya están tomando, con miras a evitar un incremento en la temperatura global mayor a 1.5ºC para los próximos años.
El Día internacional contra el Cambio Climático, establecido el 24 de octubre de cada año, es una oportunidad para hacer conciencia del reto que implica cuidar que cada una de las actividades que realicemos no contribuya al calentamiento global. En ese sentido, Thales ha sumado sus acciones para ayudar a la construcción de un mundo más ecológico e inclusivo, y muestra de ello son sus diversos planes de acción que incluyen, desde una estrategia integral de carbono, hasta acciones en materia ambiental, social y de gobernanza (ESG por sus siglas en inglés)
A medida en que las nuevas tecnologías, como la IA o la Biometría, se vuelven más poderosas, la transformación digital está impulsando la demanda de un mayor compromiso con las prácticas éticas. Por ello, Thales se ha comprometido a actuar de manera responsable al hacer uso de estas tecnologías que plantean una serie de temas humanos, ambientales y relacionados con la seguridad.
De camino hacia una meta de “Cero emisiones netas”.
De las metas más ambiciosas que Thales se ha fijado en esta materia, destaca el objetivo de lograr “cero emisiones netas” en sus actividades operativas para el año de 2040, para lo cual espera lograr una reducción de 35% en el año 2023, de 50% al llegar a 2030 y finalmente lograr el “cero neto” para el año 2040. Con ello, el grupo busca reafirmar los compromisos adquiridos tras firmar el Business Proposals para la COP21 en 2015 y el French Business Climate Pledge en 2017 y 2019.
Además, Thales ha canalizado su experiencia tecnológica para combatir el calentamiento global al extender sus objetivos a los servicios que ofrece a sus diversos clientes, como el de la aviación civil, mediante la optimización de la operación de aeronaves, aprovechando su liderato en sistemas de gestión de vuelo (FMS). De esta manera busca reducir las emisiones de CO2 entre 10 y 15% o en más de 100 millones de toneladas de CO2 para el año 2040.
IA al servicio de la eficiencia energética y observación atmosférica.
A ello, ha sumado también importantes aportaciones para ayudar a la observación de la tierra, aprovechando su liderazgo global en sensores y satélites para ampliar las capacidades básicas de vigilancia basadas en el espacio. De esta manera, Thales Alenia Space ha sido seleccionada para cinco de las seis misiones previstas para los próximos años en el Programa Copernicus de motorización del clima y observación de la Tierra.
Thales participa mediante la inclusión de instrumentos de desarrollo para medir la cantidad de CO2 atmosférico causado por la actividad humana, al grado de ayudar a determinar los tipos de emisiones con una precisión sin precedentes (dentro de un espacio de 4 m2) para detectar picos de contaminación en torno a una fábrica o ciudad.
Por otra parte, el Grupo trabaja en el desarrollo de tecnologías disruptivas que harán que la inteligencia artificial sea más eficiente en la energía. Como resultado, Thales es la primera compañía en desarrollar la IA “frugal”, basada en algoritmos que solo requieren pequeñas cantidades de energía como parte integral del diseño de arquitecturas de red neuronal.
Tecnología cuántica e innovación con una visión verde.
No podía quedar atrás el esfuerzo que Thales hace para el desarrollo de sus tecnologías cuánticas (sensores, comunicaciones y criptografía post-cuántica), mismas que ofrecerán ganancias significativas en el desempeño ambiental, gracias a la evolución de los sensores, como las antenas, para aumentar su rendimiento en un factor de 10 (y hasta 1,000) con un factor de forma significativamente más pequeño.
Finalmente, podemos mencionar el diseño ecológico que Thales está aplicando a una proporción creciente de sus nuevos desarrollos, con la intención de adoptar estos principios para el 100% de sus nuevos productos y servicios para 2023. Además, el grupo promueve activamente sus tarjetas inteligentes de diseño ecológico, que se espera que representen el 35% de todas sus ventas de tarjetas inteligentes en 2025.
De esta manera, y siendo congruentes con su visión de desarrollo sostenible y responsable, Thales mantiene la estafeta adquirida para lograr un futuro libre de emisiones y amigable con el entorno, a fin de permitir que el desarrollo tecnológico deje de ser un factor que atente contra el medio ambiente y se convierta en un aliado que ayude no solo a hacer frente, sino a revertir los efectos del cambio climático durante la primera mitad del siglo XXI.
Igual que en otras industrias, los servicios financieros están inmersos en una época de transformación…
Según los informes de Ookla del primer semestre de 2024, los servicios de internet y…
ESET analiza a qué riesgos se exponen niños en Snapchat, comparte consejos para garantizar su…
A través de este convenio, Zoho desarrollará Modelos de Lenguaje Extenso (LLMs) con las herramientas…
La inteligencia artificial sigue tomando el mando de los procesos en general. Aunque no es…
Por Gastón Gorosterrazu, creador de Aptugo, herramienta de desarrollo visual inteligente