La firma china Hisense podría instalar una nueva planta en el estado mexicano de Nuevo León, la cual estaría destinada a abastecer los refrigeradores de la marca principalmente al mercado de Estados Unidos.
“Analizamos toda la cadena de valor donde se instale la empresa y en ese sentido, la información que tenemos es que Querétaro y Nuevo León es donde está más estructurada esa cadena”, explicó Murillo.
La empresa asiática está incrementando su presencia en México. El pasado mes de marzo, como publicaba SiliconWeek, Hisense anunciaba la inversión de 30 millones de dólares para consolidar sus pantallas en Estados Unidos, fomentando el trabajo de su planta en Rosarito, México, “con lo que busca mejorar y aumentar la capacidad de producción, con el objetivo de enviar un máximo de cuatro millones de pantallas al mercado estadounidense al año”, según explicaban desde la compañía.
De hecho, esta planta fue comprada en el mes de enero a Sharp, lo que le otorgó el derecho de utilizar el nombre de Sharp así como todos sus recursos, además de ser la empresa encargada de la producción total de pantallas planas y distribución para toda América -excepto Brasil-.
En la actualidad, los líderes de Hisense explicaron que tampoco se descarta ahora el esquema mediante el cual se abrió su primera planta en México, la de pantallas en Rosarito.
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