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La era de la nube múltiple híbrida

En un momento en que se entregan nuevos proyectos a los departamentos de TI en solo unas pocas horas, es difícil imaginar una era no muy lejana en la que los procesos fueran más lentos y tuvieran semanas o incluso meses en completarse. Agreguemos a esto el desafío de los equipos aislados y la complejidad de las organizaciones de partes interesadas, y estas condiciones complican los objetivos de cualquier equipo de negocios, que es acelerar la entrega de servicios a los usuarios, o “tiempo de comercialización”. 

Dentro de las empresas, también existe una división generacional entre los procesos antiguos y los nuevos que se forman en la nube. Sin embargo, si bien la nube a menudo se percibe como rentable porque se factura por pago, en realidad puede costar mucho dinero a las empresas si se usa constantemente, para aplicaciones con cargas de trabajo inalteradas. ¿Cómo pueden las empresas cerrar esta brecha generacional, al tiempo que mejoran la eficiencia operativa y controlan los costos de TI? ¿Cómo pueden los proveedores de soluciones tecnológicas apoyarlos mejor? 

Ante esta filtración de prácticas en la nube pública, los departamentos de TI tuvieron que considerar una solución que ofreciera la misma calidad de servicio, así como otras garantías como seguridad de datos, cumplimiento, control de costos o gestión de recursos humanos existentes. Esto condujo a la creación de la nube privada, una transposición dentro de las empresas del modelo de nube pública y sus dos pilares principales: la agilidad de TI gracias al portal de servicios y la facturación de pago por uso. 

La nube privada tiene diferentes ventajas. En primer lugar, se mejora la seguridad de los datos, ya que permanecen in situ dentro de la empresa. Luego viene un mayor grado de control sobre el costo de la nube y el rendimiento del procesamiento. Finalmente, las empresas tienen un control mucho mayor sobre las especificidades: la nube privada puede adaptarse a la configuración específica que una empresa necesita en términos de reglas y herramientas. 

Para implementar su nube privada, las empresas confían en dos prácticas intrínsecamente vinculadas: la automatización de herramientas y procesos y la orquestación de tareas. Gracias a esta combinación, las empresas ahora pueden implementar sus proyectos de TI en minutos u horas, en lugar de meses, acelerando su tiempo de comercialización y mejorando su competitividad a través del éxito de su transformación digital. 

Después, las empresas buscaron aprovechar los beneficios de las nubes privadas y públicas, dando lugar a nubes híbridas o multi-híbridas. Con las capacidades de orquestación, las empresas pueden mover fácilmente sus cargas de trabajo de una nube a otra y realizar un seguimiento de sus necesidades y costos de TI. Ganan agilidad y condiciones para satisfacer a sus usuarios. 

La infraestructura híbrida correcta para cualquier empresa dada suele ser una combinación de instalaciones locales, alojadas, “conectadas” a la nube pública y “dentro” de la nube pública. Para este fin, la mayoría de los usuarios preferiría una infraestructura unificada que proporcione una interfaz de usuario común, una experiencia en la nube común y una suscripción o licencia común, lo que les permite alinear las cargas de trabajo de la aplicación con la infraestructura de nube híbrida más adecuada. 

Como una extensión de la contenedorización híbrida o multi-nube, una nueva tendencia implementada por diferentes compañías que permite optimizar las tasas de utilización del servidor y mejorar el rendimiento al tiempo que reduce los requisitos de mano de obra, es una nueva etapa de evolución que los proveedores deben enfrentar en su apoyo para todas las empresas. 

Los proveedores deben demostrar que no solo pueden admitir una variedad de opciones híbridas, sino que también pueden proporcionar una experiencia unificada / común y movilidad entre las configuraciones. De esta manera, las organizaciones no pueden cometer un error porque pueden ajustar su nube híbrida moviendo las cargas de trabajo según sea necesario. 

Abordar estos criterios eliminará la división en la nube y ayudará a las empresas a crear un entorno de TI moderno que ofrezca el mejor escenario para la protección de datos, la optimización del rendimiento, la optimización de costos y la agilidad empresarial. 

Redacción Silicon Week

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