Cali, la tercera mayor ciudad de Colombia, y la más violenta, está aprovechando el poder de los grandes datos para contrarrestar las percepciones negativas acerca de la región y para conseguir una mejor imagen tanto entre los ciudadanos como con los inversores de negocios.
De acuerdo con nearshoreamericas, “es difícil contemplar hacer negocios en Colombia sin tener en cuenta el impacto de la violencia y el crimen” y es que, a parte de la realidad, también abundan los conceptos y temores erróneos. De acuerdo con Stephen Loynd, director del programa global para el clienteen Frost & Sullivan , que visitó Cali en agosto, dijo que “la brecha entre la percepción y la realidad es enorme, sobre todo en los medios de comunicación en Estados Unidos”.
Eso no quiere decir que Cali sea una ciudad exenta de problemas. El alcalde, que ejerce ahora su segundo mandato, ha sido franco en el tratamiento de estas cuestiones, especialmente en términos de delincuencia y ha trabajado para identificar los factores que contribuyen a la delincuencia en Cali. En un principio, se mostró que temas como el alcohol que los ciudadanos consumen los fines de semana dan muchos más problemas que los cárteles de droga y esto se descubrió analizando los datos.
Carolina Monsalve, gestora de inversiones para el sector de servicios en Invest Pacífico , explicó que no se trata sólo de uso de los datos, sino de mostrar los números en detalle, segregados, y contextualizarlos para que la gente entienda su significado. Así, dice Monsalve que gracias al uso de datos reales, “en Cali, hemos sido capaces de cerrar la brecha entre la percepción y la realidad de las tasas de homicidio”.
Uno de los objetivos de Cali es llamar la atención del inversor extranjero, limpiando la percepción que hay sobre la ciudad y conseguir hacer de esta una ciudad inteligente, que lleve con el tiempo a una mayor calidad de vida de sus ciudadanos y a una reducción de la violencia.
Sin embargo, todavía hay obstáculos. Por un lado, de acuerdo con las palabras del alcalde, hay ciertos empleados del gobierno que ponen resistencia a la hora de liberar las informaciones y los grandes datos recopilados entre los ciudadanos, ya que creen que eso podría suponer la pérdida de poder. Por otro lado, el gobierno colombiano está presionando para que se puedan suministrar datos abiertos a través de su iniciativa de la Asociación de Gobierno Abierto.
Otro obstáculo es la integración de datos a través de diferentes sistemas y asegurar que los datos están en un formato que se puede utilizar, comprender y comunicar a todos.
Para conocer más sobre Cali como ciudad para invertir, lea el reportaje Cali, la puerta colombiana al Pacífico
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