La nube híbrida toma a las empresas de América Latina
HPE Flexible Capacity, una experiencia que está cambiando la forma en que las organizaciones suman su data a la nube, y cuidan la información y aplicaciones más relevantes en infraestructura propia.
América Latina se encuentra en una transformación digital debido a que muchas compañías han comenzado a migrar parte de su data a la nube, principalmente creando plataformas híbridas, y algunas otras han empezado a repatriar su información a servidores internos por temas de ciberseguridad, regulaciones locales y acceso más rápido a sus herramientas tecnológicas.
Los retos que enfrentan las diversas organizaciones en la región, principalmente las medianas y grandes empresas, tienen que ver con temas de ahorro de costos, optimización de procesos y uso de infraestructura local para impulsar sus negocios a un mundo globalizado por internet, y ser más competitivas frente a sus rivales.
Según una encuesta de IDC a 200 empresas top en América Latina (AL), que se dio a conocer durante el webcasting HPE Flexible Capacity: La combinación adecuada para su datacenter realizado por SiliconWeek, en temas de iniciativas de tecnología,44.2% buscan la seguridad de TI para evitar ser víctimas de la ciberdelincuencia, 33.9% la optimización de aplicaciones de negocios, y con 31.1 por ciento soluciones en nube y optimización y consolidación de infraestructura tecnológica.
Para Cesar Galvis, líder de ventas de HPE Flexible Capacity para AL, en el mercado las empresas buscan como utilizar los recursos financieros de una forma más óptima y al mismo tiempo tener la flexibilidad para responder a las necesidades del negocio. “Lo que ocurre es que generalmente las compañías no tienen hoy una sincronía entre la capacidad de necesidad de cómputo, networking y almacenamiento que se requiere en diversos procesos de la organización y eso crea insatisfacción”.
Para Galvis, cuando se tiene demasiada capacidad disponible de almacenamiento y uso de banda ancha, y no se usa correctamente, hay recursos que se están desperdiciando y eso origina gastos innecesarios. “Se atan recursos que podrían estarse usando en otras áreas de la organización para crecer”.
La nube, asegura el directivo de Hewlett Packard Enterprise (HPE), ofrece muchas ventajas como el pago por uso y la inmediatez, pero hay cargas de trabajo que deben tomarse por completo en la empresa, sobre todo cuando hablamos de seguridad de la data, soberanía y regulaciones de gobierno. “Entonces nuestra apuesta es que las empresas van a tener un modelo híbrido de nube, y lo importante es conocer cuál es el balance correcto, cuántas y cuáles cargas se quedan, y cuántas y cuáles van a la nube. A eso hay que sumar cómo vamos a usar los recursos que ya tenemos en la compañía”.
Jerónimo Piña, gerente de investigación de Software y Cloud de IDC Latinoamérica, coincide en este tema, pues asegura que según las investigaciones de la consultora, las empresas tienen diferentes retos para hacer más ágil su operación y pasar de una etapa de eficiencia a la innovación. “Esto quiere decir que las compañías quieren encontrar primero cómo optimizan sus recursos y sus procesos para poder ser más eficientes, antes de pensar en proyectos de innovación y transformación digital”. La segunda, agrega, es cómo capacitar a la fuerza laboral y la investigación hacia las tendencias digitales. “Una más es cómo modificar sus modelos de negocio para hacerlos más ágiles, y cómo modernizar su infraestructura sin hacer gastos más fuertes”.
A continuación, el webcasting emitido recientemente para los lectores de SiliconWeek en América Latina:
Acceso, control y ahorros
Para ambos especialistas que participaron en el webcasting de SiliconWeek, el rol de los responsables de las áreas de TI ha ido cambiando, pues los nuevos modelos como la nube híbrida están ayudando a que abran los ojos y no se queden fuera de las tendencias, algo que se veía recurrente la década pasada al interior de las compañías.
“Hoy cualquiera puede acceder a la nube, y lo que no quieren los especialistas de TI es perder el control de lo que está pasando en su plataforma al interior. Hay una contracción del capital humano con ello. Las empresas no están buscando contratar más gente con la llegada de la tecnología, sino optimizar lo que ya se tiene. ¿Cómo hacerlo? liberando tiempo y recursos para destinarlos hacia tareas de más valor en los negocios como la transformación digital”, asegura Piña.
Ante ello, asegura que hay inversiones en esta TI que inclusive vienen apalancadas desde otras áreas. “Hoy 40% de los proyectos para tecnologías de la información tienen recursos de las áreas de negocio. En América Latina, a diferencia de otras regiones como Europa, solamente uno de cada tres CEOs tienen en su agenda para este año temas de transformación digital, mientras que en el viejo continente son dos de cada tres. Evidentemente esto no implica una amenaza sino una oportunidad para los tomadores de decisiones de TI”, agrega.
Datos de IDC afirman que 40% de las tres mil empresas Top de AL ya tienen equipos especiales enfocados a estos temas de transformación digital con infraestructura propia, con lo cual facilitan la transición de la eficiencia a la optimización.
“Lo importante que deben saber las empresas es que hay que aprender a vivir con lo que hoy tenemos y sumar nuevos modelos de negocios en nube”, agrega el gerente de IDC.
En este tema, Galvis afirma que el principal reto que las empresas están teniendo actualmente es que muchas corrieron directamente a la nube por temas de ahorro de dinero. “Subieron aplicaciones pero muchas de ellas no debían estar ahí. Hoy vemos muchas empresas repatriando su data y eso es lo que aprendieron: algunas aplicaciones sí deben estar en cloud, pero otras deben quedarse en servidores de la compañía”.
“Otro tema es el de las regulaciones. Con todo lo que está pasando hoy por temas geopolíticos en el mundo, hay regulaciones específicas en cada país sobre cómo se usa la data y sus políticas de seguridad. Cuando yo tengo una política de seguridad específica, pongo dentro de mi centro de cómputo lo que considero oportuno tener en casa, pero cuando migro aplicaciones a la nube, no sé qué tipo de políticas estén utilizando para mi data cuando está en la nube. De ahí la importancia de saber con quién se trabaja y el expertise con el que cuenta”, agrega el directivo de HPE.
La herramienta más flexible y capaz
Los datos de IDC muestran que al hablar de servicios de nube pública, privada e híbrida, hoy en América Latina las empresa destinan un 10% de su gasto en TI a estas herramientas en internet.
“En América Latina, hablamos que estos servicios están creciendo 2.3 veces más que en otras regiones del mundo. Los públicos representan 39% del mercado total de la nube, y donde el tipo de carga de trabajo que se han llevado a este modelo son procesos no críticos. La nube privada representa 45% de los servicios, donde hemos visto que las empresas cada día evalúan más este modelo por los procesos críticos, como la seguridad, las regulaciones locales y los accesos más rápidos a la data”, asegura Piña.
Sin embargo, para el gerente de investigación de Software y Cloud de IDC Latinoamérica, hoy hay una realidad en toda la región: mucha de las bases instaladas de las empresas tienen soluciones dentro de los centros de datos locales y, aun cuando las soluciones en nube están expandiéndose rápidamente, no van a desplazar la base instalada en temas de infraestructura”.
“Una cuarta parte de los presupuestos de las áreas de TI van a ir directamente a estos nuevos modelos híbridos, que es hacia donde estamos viendo la tendencia en los próximos años”, agrega Piña.
Para Galvis, las empresas que hoy cuentan con infraestructura propia, pero que tienen diferentes presiones como la innovación y responder a la línea de negocios, implementar más aplicaciones, optimizar recursos humanos y económicos son las candidatas ideales para la nube híbrida.
“La optimización de recursos es básicamente la clave. En el modelo tradicional de compra, las empresas sobredimensionan sus requerimientos por dos o tres años. Luego de ello, entienden que es mejor pagar por uso por lo que necesitan, eso llevó a la migración de muchas aplicaciones a la nube pública. Sin embargo, como ya lo hemos comentado, hay compañías que están repatriando esa información o carga de trabajo, pues no recibieron los beneficios esperados por temas de performance o por tener problemas en temas de regulación”, agrega el directivo de HPE.
Para ambos especialistas, lo que ven a corto plazo es una mayor contratación de servicios de nube híbrida, pues en ella el cliente puede obtener los beneficios que tiene hoy económicamente en la nube pero manteniendo la infraestructura de su centro de cómputo.
“HPE Flexible Capacity es una solución de HPE que te permite tener en sitio las ventajas de una nube pública. Eso quiere decir que el cliente elige qué infraestructura quiere tener en su centro de cómputo, permanecer en sus primicias, que su data sea soberana y bajo sus condiciones de ciberseguridad, sin latencia, ágil y flexible, instantánea e ilimitada. Además, tienen las ventajas de pagar por uso. Sólo se destinan recursos por la capacidad que se utiliza”, explica Galvis.
Piña coincide en que la capacidad ociosa es un enemigo de las empresas que no están identificando hoy en día. “Muchos sobredimensionan sus equipos por dos o tres años, y eso origina gastos innecesarios que podrían ir a temas de investigación y desarrollo”, agrega.
“Una de las preguntas que hacemos año con año a los tomadores de decisiones en TI es si piensan mantener, incrementar o reducir sus presupuestos en ésta área, y en nuestra reciente investigación se señala que al menos 65% de las empresas están entre mantener o algunos reducirlo.
“Estos modelos como el de HPE Flexible Capacity son una opción óptima para las empresas que están precisamente buscando una solución que, por un lado les permita seguir aprovechando su infraestructura tecnológica, pero también aprovechando los beneficios de la nube pública, que reitero es la tendencia que vemos en América Latina”, agrega el especialista de IDC.
Galvis agrega que la ventaja de la plataforma HPE Flexible Capacity es que da a sus proveedores de servicio la flexibilidad de hacer un partimento entre los ingresos que reciben de sus clientes y los costos que tienen de infraestructura. “Vamos siempre acompañando el crecimiento de los servicios probables a medida que van trayendo más clientes a su nube”, señala.
Para el directivo de HPE, el sector financiero es un candidato óptimo para plataformas como esta, ya que actúan bajo un tema de regulación que no les permite tener su data en la nube pública, “pero también está el de la salud, que debe tener la privacidad de los pacientes bien resguardada. Aunque diría que hay muchos sectores que son clientes ideales para Flexible Capacity, todos aquellos que quieran balancear sus costos y su capacidad instalada de infraestructura así como sus necesidades de innovación”.
Finalmente señala que con la expansión de la industria del Internet de las Cosas y toda su infraestructura, esta plataforma de HPE es relevante para ello. “¿Cómo voy a guardar la información? ¿Cómo la voy a analizar y cómo la puedo ir creciendo a medida que requiero más capacidad? Esta es parte de la solución que damos a las compañías en la región”.